El día festivo musulmán se convirtió en la franja de Gaza en jornada de muerte y dolor. Quince palestinos murieron en sólo 24 horas como consecuencia de las acciones del Ejército israelí, ocho de ellos ­todos civiles, incluidos dos bebés­ en un bombardeo contra una playa en la que familias palestinas trataban de disfrutar de la jornada de fiesta. Este bombardeo fue rechazado por Moscú y Madrid, pero no así por Washington, que dijo comprender el «derecho a la defensa» de Israel. El brazo armado de Hamas anunció el fin de la tregua que mantenía desde hace año y medio y prometió atacar hoy en Israel.




Leer más Rebelion (11-06-2006)