Desde el Palacio del Gobierno de Beirut, Fouad Siniora, volvía este viernes a alzar la voz para denunciar el planeamiento de un «golpe de estado» por parte de su gran opositor y líder de Hezbolá, Hasán Nasralah.
El artífice del «triunfo divino» de este verano contra Israel, con un solo llamamiento a la unidad de los musulmanes, logró que este viernes los sunís se unieran a sus incondicionales partidarios chiís en una multitudinaria oración, acompañada también por los fieles del general cristiano Michel Aoun. Demostrando una vez más, que este movimiento «no es chií», «ni sólo de Hezbolá» sino de Unidad Nacional, representado por banderas libanesas y representado por la mayoria del pueblo libanes.
Desde el Palacio del Gobierno de Beirut, Fouad Siniora, volvía este viernes a alzar la voz para denunciar el planeamiento de un «golpe de estado» por parte de su gran opositor y líder de Hezbolá, Hasán Nasralah.
El artífice del «triunfo divino» de este verano contra Israel, con un solo llamamiento a la unidad de los musulmanes, logró que este viernes los sunís se unieran a sus incondicionales partidarios chiís en una multitudinaria oración, acompañada también por los fieles del general cristiano Michel Aoun. Demostrando una vez más, que este movimiento «no es chií», «ni sólo de Hezbolá» sino de Unidad Nacional, representado por banderas libanesas y representado por la mayoria del pueblo libanes.
La plaza de los Mártires, símbolo monumental de la resurrección libanesa, y la de Riad al Solh, se han convertido desde hace una semana en una superlativa demostración de fuerza de «todos contra el Gobierno» que, se incrementará con la manifestacion convocada para mañana domingo.
Nasralah el jueves hizo unas declaraciones publicas, y prometió continuar la protesta hasta tumbar a un Gobierno contra el que dirigió acusaciones muy feroces Que Fuad Siniora no sólo colaboró con Israel en los recientes combates librados por el Ejército hebreo contra Hezbolá -filtrando datos sobre el paradero de los dirigentes milicianos para que fueran bombardeados-, sino que fue quien pidió a Estados Unidos que el Estado judío se lanzara contra el grupo islámico . (según Laura L. Caro, Colpisa)
Añadimos que hace dos semanas se firmó un convenio de comercio con Estados Unidos, que además las ayudas economicas para la reconstruccion de Libano no han llegado a las familias, y que el sufrimiento del pueblo es y ha sido mucho. Los libaneses no olvidan, quizás Siniora sí precisamente porque ha sido parte de su plan.
La defensa de Siniora, desmintiendo en solitario las inculpaciones, quedaba eclipsada frente a la grandilocuencia y la arrogancia del mensaje de Nasralah, y los miles y miles de seguidores que le acompañan, y quien ha pedido calma.
«No alzaremos las armas apuntando a las caras de nadie. No necesitamos armas para derrotaros: os venceremos con nuestras voces». Resaltó su sello de independencia diciendo que «Rechazamos la tutela del hermano, del vecino y del enemigo» , añadiendo también palabras dirigidas a «los reyes árabes que nos amenazan con guerras civiles en la región» , en lo que se ha interpretado como un aviso a Jordania. «No se fíen de los informes de sus embajadores y vengan a ver con sus propios ojos lo que sucede en el Líbano» .
Curiosamente las mismas palabra que decimos todos los que realmente visitamos y vemos con nuestros propios ojos los efectos de la política genocida de Israel (escondidas bajo las mentiras y manipulaciones de la prensa).
Hasta Tomas Alcoverro -corresponsal de la Vanguardia- y desde luego no simpatizante de Hezbollah, ha escrito en su columna de hoy sobre el peligro que supone que la mayoría de gobiernos árabes y europeos se hayan situado al lado del gobierno de Siniora, ignorando la autoridad del presidente Lahud y desdeñando a las fuerzas de la oposición , . El alineamiento de los gobiernos arabes y occidentales con uno de los bandos enfrentados constituye -según Alcoverro- una injerencia en los asuntos internos de Libano; y añade que es imposible gobernar sin la representación chií, tras la dismision de sus ministros, porque su comunidad es la más numerosa. Y porque, añado, cuenta con el masivo apoyo popular que algunos cifran en más de un 70% de la población.
Por ahora este es uno de los obstáculos de Israel, quien inició la destrucción del Libano con el objetivo de derrotar a Hezbollah, y sin pretenderlo lo ha fortalecido. Es por ello que se orquestó el asesinato de Pierre Gemayel, culpando sin ningún tipo de pruebas a Siria y Hezbollah, cuando sabemos que al igual que con el asesinato de Hariri, y otros más en Líbano, la sombra del Mossad aparece en cada investigacion que se inicia -si bien matan a quien pueda declarar en su contra- (James Petras, Mundo Arabe).
En fin, mientras los libaneses sigan en la calle hay esperanza. Que pena que la prensa occidental no nos cuente lo que realmente está pasando, pues en estos momentos de desesperanza para Oriente Medio, Nasralah es el único capaz de reforzar la tan necesitada resiliencia.
Maria José Lera
Fuentes originales,
Laura, L. Caro, Colpisa
Tomas Alcoverro, La Vanguardia
James Petras, Mundo Arabe
Al-Jazzeera (emite en ingles desde el 15 de Noviembre)